chichen itza

Aquel día me levante temprano, a las 6:00 am para ser exactos .Me disponía a coger un autobús que me llevaría de Cancún a Chichen Itza para ir a ver las pirámides mayas. Como no, yo que soy así de cutre decidí coger el autobús de segunda clase y….en que hora!!Nunca paré por tantos pueblos para ir a un lugar. Recogíamos a gente de la carretera sin parar y de poblados de palapas abandonados de la mano de dios. Después de cuatro horas así (cuando los de primera clase tardan dos) por fin llegue a mi destino, y fue increíble.
Para seguir con mi rutina de gualtrapa, no cogí la visita guiada para enterarme de lo que se hacía en esas pirámides…y como no, mi manera alternativa fue juntarme con un grupo de españoles pa enterarme de to´por la face. Todo el grupo de españoles llevaba una pulserita azul, que marcaba que eran del mismo grupo, del 1004, y yo ¿Qué es lo que hacía? meterme las manos en los bolsillos, sonreír al guía y asentir con la cabeza jejejejej yo creo que se estaba dando cuenta de todo mi teatro pero finalmente me salí con la mía.
Pues bien, en el fondo me enteré de cosas muy curiosas, como por ejemplo que esta `pirámide está construida con ciertos cálculos que hacen que si das una palmada en frente de ella se reproduzca el sonido que hace el pájaro Quetzal, impresionante, me quedé loca.
También en cada solsticio el sol incide de tal manera en la pirámide, que se puede contemplar una serpiente (en honor a su dios) formada por siete triángulos de luz que coninciden con la cabeza de una serpiente de piedra de la pirámide.La serpiente va bajando y deslizándose por la pirámide hasta que desaparece perdiendose en la tierra. Te quedas loco como los mayas hacían estas locuras matemáticas en el año 400.
Pero también estaban un poco pinzaetes, no paraban día a día de hacer sacrificios. Jugaban a un juego de pelota, y el que marcaba gol, era el afortunado de ser el sacrificado, y lo peor de todo es que era un honor ser el sacrificado. Muy interesante pero muuuuuy fuerte.